miércoles, 23 de noviembre de 2011

Llamada

Insertar la moneda, presionar el botón, digitar el número, adoptar la posición adecuada y prepararse para responder. Debería ser suficiente. "Buenas tardes, con el señor...", y "para consultas, marque 1, para hablar con el señor... marque 2". De inmediato al 2 y el saludo "Buenas tardes, con el señor", y esta vez "le habla el secretario del señor... espere un minuto, por favor". El minuto transcurre y el ansia se eleva. ¿Estará aquél señor?, debería preguntar, pero nunca la dejan. Pasa el minuto: ni el señor... ni el secretario, ni nada. Pronto alguien contesta, y el saludo de siempre "llamé para hablar con el señor...", "él le habla", y una gran alegría por tener ya respuesta. La llamada se corta. Ya no quedan monedas.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Vestido blanco

El flameante doctor se preguntaba por lo blanco de su atuendo. Se paseaba por los pasillos del hospital con esa duda. Hasta que un día, durante la comida, se manchó una manga con ketchup. Entonces comprendió que era un lienzo ideal.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Tiempo libre

Tiempo libre. Cuando las horas se hartan de pasar y apuran su marcha, ingenuas, esperando encontrar más allá un descanso.

martes, 8 de noviembre de 2011

Milagro de parque

Y, como por arte de magia, un evento milagroso. El hombre lisiado echó a andar cuando vio que su lata tenía suficientes monedas.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Adioses

Es simple. Tú cruzas queriendo quedarte, por eso das la vuelta, por eso giras ligeramente la cabeza, por la duda, y luego el torso, intentando quitarte un adiós de la mano al sacudirla.